martes, 16 de abril de 2013

Masanobu Fukuoka


Resultado de una vida sin grandes necesidades, de familia campesina, re descubridor de una filosofía, como diríamos en Chile: "a la antigua", de un estilo de vida auto-sostenible, de una agricultura natural y productiva.

“Todo lo que yo he hecho es esforzarme en hacer cada vez menos con la intención de llegar a no hacer nada”, le dije a mi audiencia en Amherst. Yo pasé algo así como cincuenta años cultivando en una forma que me hiciera ver las cosas que no tengo que hacer, en vez de buscar nuevas cosas que hacer.
La gente dice que hay un propósito en la vida y hablan sobre lo que hace que la vida sea valiosa, pero la vida no tiene ningún propósito. Me di cuenta de esto hace cincuenta años, y también comprendí que nunca hubo nada que nosotros tuviéramos que hacer. Tales ideas son solo caprichos del hombre inventándose a sí mismo.
La gente se propone realizaciones tentativas, con la ilusión de que, al conseguir éstas, serán felices y ricos. Piensan que no hacer nada es llevar una vida aburrida y vacía; pero no, es justamente lo contrario. Hacer nada, vivir una vida sin objetivos, hacer una siesta cuando convenga, ésa es la puerta hacia el más placentero de los mundos. - Masanobu Fukuoka



Bolas de arcilla o Nendo dango
Su sistema de plantación también resulta sorprendente por su sencillez. Para evitar que los pájaros se coman gran parte de las semillas, las envuelve en bolitas de arcilla de 2-3 cm y las esparce por el campo. Con las lluvias, las bolas que protegen a la semilla se deshacen y permiten a la semilla crecer.
http://ecocosas.com/perm/fukuoka-y-la-senda-natural-del-cultivo/


LIBRO DE FUKUOKA

A menudo sueño con la independencia de un sistema ingrato, con la caída del modo corrupto e injusto en que esta actualmente nuestro mundo. ¿Que es lo que realmente necesitas? si lo piensas bien o has estado en la necesidad, te darás cuenta que no necesitas mucho pero lo que necesitas es de un valor inmedible... tanto así que te pone en tu lugar verdadero: un punto, un pixel en un inmenso universo de ignorancia, de auto-engaño y miedo y comodidades que nos van destruyendo tanto espiritual como físicamente.
Nos jactamos de ser una clase pensante, racional pero desarrollamos un sistema de vida arcaico y básico basado en la explotación de nuestro ambiente. Rodeados de conocimientos, de excelentes y practicas ideas, de información inmediata, de "derechos humanos", de "anti discriminación"... no estaríamos hablando de leyes y correcciones si hiciéramos bien las cosas desde un inicio, si nos enfocáramos en la felicidad...

Cito a Lao Tze:
Si no vamos a ensalzar con elogios a unos supuestos escogidos, no habrá envidia entre la gente. Si no vamos a exhibir tesoros materiales, no habrá ladrones. En otras palabras, si no vamos a poner a la vista los objetos de las pasiones, no habrá tentaciones.
Un gobernante sabio no crea tales tentaciones para el pueblo, sino que se preocupa de que las personas estén bien alimentadas. Esto elimina las pasiones y fortalece la salud de los súbditos. Sí, un gobernante sabio siempre se esfuerza para que la gente no tenga tentaciones y pasiones y para que las personas profundamente viciosas no se atrevan a actuar.
La ausencia de todo lo mencionado trae la tranquilidad.

Pero que mejor que mezclar ambas ideas y autogobernarse, proporcionarse uno mismo los alimentos te libera de una especie de esclavitud en la que se ha convertido el actual modo de vivir...

domingo, 7 de abril de 2013

Mitos(?) y leyendas de la alfarería indígena americana.



"Los indios de Guayana rodeaban la fabricación de vasijas de prohibiciones tan estrictas como los yurucarés: «Están convencidos de que sólo se puede extraer la arcilla en la primera noche de luna llena (...) Durante esa noche se reúne gran número de gente. De madrugada, los indígenas regresan a sus aldeas con enormes provisiones de arcilla. Están profundamente convencidos de que si hicieran recipientes con arcilla extraída en cualquier otro momento no sólo tendrían tendencia a resquebrajarse sino que provocarían múltiples enfermedades en aquellos que los utilizaran para comer».
Un mito recientemente obtenido de los wauras, indios de la familia lingüística arawak en la región del alto Xingú, atribuye el origen de la alfarería a las peregrinaciones de una serpiente sobrenatural, portadora de diferentes tipos de recipientes, y cuyo viaje finalizó en un lugar donde hay abundante arcilla. También en este caso, cuando hay que obtener arcilla, se deben tomar muchas precauciones. Se la debe extraer muy suavemente. Si se hiciera ruido, la serpiente haría repentinamente su aparición y se os comería: «En este lugar, hay que evitar hacer el menor ruido. Es peligroso, sí, muy peligroso. Desde hace muchísimo tiempo los wauras se abstienen de extraer arcilla en este lugar»."